Cansado de las pesadillas, de no poder dormir por miedo a las pesadillas, al fin fui al doctor. Me recetó un medicamento que me hizo muy bien. A pesar de mis temores, esa misma noche dormí cuatro horas seguidas y sólo me despertó la luz del sol que caía sobre la cama. No tuve pesadillas, o al menos no recuerdo haberlas tenido. Durante unas semanas, tomé una pastilla cada tarde, con la merienda. Por la noche dormía seis horas y llegué a disfrutar de varias siestas. Estos días cada vez me cuesta más levantarme de la cama, cuando al fin lo logro siento que el mundo está lleno de algodones. Y, sólo ahora me doy cuenta, ya no puedo volar.
Monday, November 27, 2006
Cansado de las pesadillas, de no poder dormir por miedo a las pesadillas, al fin fui al doctor. Me recetó un medicamento que me hizo muy bien. A pesar de mis temores, esa misma noche dormí cuatro horas seguidas y sólo me despertó la luz del sol que caía sobre la cama. No tuve pesadillas, o al menos no recuerdo haberlas tenido. Durante unas semanas, tomé una pastilla cada tarde, con la merienda. Por la noche dormía seis horas y llegué a disfrutar de varias siestas. Estos días cada vez me cuesta más levantarme de la cama, cuando al fin lo logro siento que el mundo está lleno de algodones. Y, sólo ahora me doy cuenta, ya no puedo volar.
Saturday, November 25, 2006
Absolut Psycho.
Con la Majo acabamos de ver El talentoso Sr Ripley. Más de dos horas de ver cómo el chabón, psycho zarpado, se hunde cada vez más en sus delirios mientras arrastra a quienes lo rodean. De esta sesión cinematográfica matutina surgieron algunos pensamientos (una vez más, sin conclusiones: cada vez concluyo menos):
- Hay muchos psychos rondando por ahí y algunos rondan cerca.
- Dentro de la cobardía que puede llevar a un psycho a no enfrentar su propia realidad, hay algo de coraje que los lleva y los hunde por un camino oscuro.
- Yo podría ser un psycho de los grosos.
- La película aporta algo que no había visto en otros argumentos: el psycho en lugar de pagar o redimirse de sus culpas a través de la muerte o de la liberación que existe en ser descubierto, se sigue hundiendo ya sin posibilidad de volver a la superficie.
- Inventamos un término copado: Absolut Psycho.
Con la Majo acabamos de ver El talentoso Sr Ripley. Más de dos horas de ver cómo el chabón, psycho zarpado, se hunde cada vez más en sus delirios mientras arrastra a quienes lo rodean. De esta sesión cinematográfica matutina surgieron algunos pensamientos (una vez más, sin conclusiones: cada vez concluyo menos):
- Hay muchos psychos rondando por ahí y algunos rondan cerca.
- Dentro de la cobardía que puede llevar a un psycho a no enfrentar su propia realidad, hay algo de coraje que los lleva y los hunde por un camino oscuro.
- Yo podría ser un psycho de los grosos.
- La película aporta algo que no había visto en otros argumentos: el psycho en lugar de pagar o redimirse de sus culpas a través de la muerte o de la liberación que existe en ser descubierto, se sigue hundiendo ya sin posibilidad de volver a la superficie.
- Inventamos un término copado: Absolut Psycho.
Thursday, November 23, 2006
En estos días, en EEUU se festeja el día de Acción de Gracias (me había olvidado de la s). Ese acontecimiento que siempre vemos en las pelis o series yanquis en los que todos son felices mietiéndole porquerías a un pavo enorme. Se supone que agradecen el momento en que unos indígenas compartieron su comida con los colonos para que los pobres blanquitos no se cagaran de hambre y de frío y para que pocos años más tarde pudieran matar a todos los indígenas que se cruzaran en su camino, robar sus tierras, violar a sus mujeres, comer su comida. Y, al final, después de varios siglos de opresión, acordarse de aquel día en que compartieron una comida.
Del otro lado del mundo, en Japón, también por estos días, se festeja el Día de Agradecimiento al Trabajo. Que quede bien claro: no es el Día del Trabajo, que todos festejamos el primero de mayo (otro día que ellos laburan 16 hs) sino el Día de Agradecimiento al Trabajo. Les machacaron durante tato tiempo con la cultura del trabajo que ya están pasados. Agradecen que tienen que levantarse a las seis de la mañana, viajar durante más de una hora en tren, entrar a las ocho del laburo, no parar para almorzar, quedarse trabajando hasta las once de la noche, llegar a sus casas pasada la medianoche, comer y dormirse para volver a levantarse en menos de seis horas. Gracias, eh. Quieren hacerte creer que los que nos dan trabajo nos están haciendo un favor en lugar de mostrarte que son unos hijos de puta que se quedan con la mitad de la guita que tendría que ser tuya. En algún momento alguien le hizo creer a la gente que trabajar como unos condenados y aceptar una sistema opresivo era lo mejor que les podía pasar en la vida, ¿si no qué vas a hacer?, si no te miramos mal, si no sos un lacra social, si no.
Me hace sentir tan bien que en los países centrales estén tan agradecidos.
Del otro lado del mundo, en Japón, también por estos días, se festeja el Día de Agradecimiento al Trabajo. Que quede bien claro: no es el Día del Trabajo, que todos festejamos el primero de mayo (otro día que ellos laburan 16 hs) sino el Día de Agradecimiento al Trabajo. Les machacaron durante tato tiempo con la cultura del trabajo que ya están pasados. Agradecen que tienen que levantarse a las seis de la mañana, viajar durante más de una hora en tren, entrar a las ocho del laburo, no parar para almorzar, quedarse trabajando hasta las once de la noche, llegar a sus casas pasada la medianoche, comer y dormirse para volver a levantarse en menos de seis horas. Gracias, eh. Quieren hacerte creer que los que nos dan trabajo nos están haciendo un favor en lugar de mostrarte que son unos hijos de puta que se quedan con la mitad de la guita que tendría que ser tuya. En algún momento alguien le hizo creer a la gente que trabajar como unos condenados y aceptar una sistema opresivo era lo mejor que les podía pasar en la vida, ¿si no qué vas a hacer?, si no te miramos mal, si no sos un lacra social, si no.
Me hace sentir tan bien que en los países centrales estén tan agradecidos.
PD: lo sé, no es un pavo, pero no tengo fotos de pavos, así que se van a conformar con un pato.
El otro día, antes de ir al supermercado para hacer las compras, me detuve a pensar cuándo habíamos comido carne, cuándo pastas y cuándo verduras. También agregué a los parámetros si al día siguiente tenía o no clase de kung fu. Ayer, comí un solo plato de fideos y quedé lleno, hace casi un mes que no como algo estilo asado-achuras. Me estoy volviendo una nenita. Yo sé que una petisa rubia a veces colorada va a sonreirse y viquear cuando lea esto, pero me estoy dando cuenta de que quiero una vida sana. Y me da bronca. Antes podía comer lo que fuera en cualquier cantidad y era feliz, sin secuelas aparentes. Pero al parecer no notaba secualas porque no corría ni un bondi. Si ahora llego a hacer eso, a los quince minutos de kung fu caigo desmayado. Sé lo que es un buen asado, atracarme de comida hasta no poder respirar, lo que se dice comer como un macho, pero ya no lo disfruto. Devuélvanme mi gula.
Ayer caminaba por el parque centenario y vi a unas chabonas colgarse de una tela roja. Saqué un par de fotos y a los diez segundos me moría de ganas de subirme. Cuando veo a alguien hacer alguna actividad física me da muchísima curiosidad, mi cuerpo tiene ganas de probar, de colgarse de saltar y hacer boludeces. ¿Qué onda? Yo era una larva feliz y ahora me agarran estos ataques.
Ayer caminaba por el parque centenario y vi a unas chabonas colgarse de una tela roja. Saqué un par de fotos y a los diez segundos me moría de ganas de subirme. Cuando veo a alguien hacer alguna actividad física me da muchísima curiosidad, mi cuerpo tiene ganas de probar, de colgarse de saltar y hacer boludeces. ¿Qué onda? Yo era una larva feliz y ahora me agarran estos ataques.
Wednesday, November 22, 2006
Tuesday, November 21, 2006
Hace poco escribí algo sobre el contraste de colores. Hoy vamos a pasar a la falta de contrastes, la monotonía.
Hay veces que uno se levanta y dice para qué mierda. Un día más en una sucesión monótona donde lo único que cambia es la intensidad con que sentís la angustia. Ni ganas de levantarse de la cama, subirse al bondi o bajar al subte, lidiar con el jefe, laburar todo el día para terminar roto a las 8 de la noche con sólo la energía suficiente de comer y dormir. (Lo sé, no es mi caso)
Pero hay una diferencia, hoy no es ni ayer ni mañana. Hoy es el día que toca vivir, ayer ya pasó y mañana no existe. Sólo hoy se pueden tomar decisiones, pasar a la acción, crear algo hermoso. La belleza que puedo encontrar en la monotonía reside en ese enfoque sutil que nos da el presente y que deja todo lo demás fuera de foco.
Hay veces que uno se levanta y dice para qué mierda. Un día más en una sucesión monótona donde lo único que cambia es la intensidad con que sentís la angustia. Ni ganas de levantarse de la cama, subirse al bondi o bajar al subte, lidiar con el jefe, laburar todo el día para terminar roto a las 8 de la noche con sólo la energía suficiente de comer y dormir. (Lo sé, no es mi caso)
Pero hay una diferencia, hoy no es ni ayer ni mañana. Hoy es el día que toca vivir, ayer ya pasó y mañana no existe. Sólo hoy se pueden tomar decisiones, pasar a la acción, crear algo hermoso. La belleza que puedo encontrar en la monotonía reside en ese enfoque sutil que nos da el presente y que deja todo lo demás fuera de foco.
PD: debería escribir un libro de autoayuda y llenarme de guita.
Monday, November 20, 2006
La última media hora de la semana terminó con una conversación con Ce*, de la cual logré extraer los siguientes pensamientos (aún no coclusiones):
- Muchas de las personas que influyeron en mi vida no supieron ni nunca van saber de mi existencia. Una prueba sólida de que el universo es uno y uno el universo; lo que hacemos influye mucho más allá de lo que creemos.
- La comprensión de algo sólo se concreta cuando se lo logra explicar a alguien, cuando se logra compartirlo.
- ¿Quién quiere ser Buda o Gandhi?
- El msn puede ser un medio de comunicación válido con varios ninveles de profundidad.
- Siempre hay que tener una botella de vino.
Sunday, November 19, 2006
Me encanta andar en bicicleta. Siento que me aísla del mundo. Si pudiera leer o escribir mientras estoy sobre los pedales, no me bajaría nunca. El otro día por primera vez anduve bajo la lluvia. Fue algo glorioso. Soledad de una violencia pacífica, como un tren que cruza la estepa. Un tipo de belleza que nadie se detiene a escribir, y está bien que así sea. Una sensación tan placentera que lo hace peligroso.
PD: qué lindo ser tren, el transiberiano.
PD: qué lindo ser tren, el transiberiano.
Parece que sentarelculo sirve para algo. Perfil publicó una versión corregida y adaptada de un cuento de este blog. Si al guien quiere leer la otra versión haga click acá nomás.
Friday, November 17, 2006
Qué feo es darse cuenta de que algo realmente bueno está al alcance de la mano y que sólo hay que matarse laburando para lograrlo. Maldito instinto de superación.
Escribí un cuento bastante bueno, de unas diez páginas. Cuento que me tomó varios días de laburo y de viajes por conflictos internos para sacarlo a la luz. Ahora, después de tres días de correcciones, me doy cuenta de que hice una elección equivocada al momento de decidir cómo contarlo. En conclusión, tengo que reescribirlo.
jkdfsjksdjkgfjlgfnjfsdhnjoñfasdoperagopjpsdjksdfa
Qué fiaca
Escribí un cuento bastante bueno, de unas diez páginas. Cuento que me tomó varios días de laburo y de viajes por conflictos internos para sacarlo a la luz. Ahora, después de tres días de correcciones, me doy cuenta de que hice una elección equivocada al momento de decidir cómo contarlo. En conclusión, tengo que reescribirlo.
jkdfsjksdjkgfjlgfnjfsdhnjoñfasdoperagopjpsdjksdfa
Qué fiaca
Wednesday, November 15, 2006
Maldita sea. Tengo la sensación de que ya no voy a poder disfrutar de los postres. Acabo de comerme un alfajor, lo único que tenía para almorzar antes de salir a Kung fu, y me cayó para el orto. Ni ganas tenía de comerlo, pero necesito algo de carbohidratos para la clase.
Creo que hay un antes y un después de este alfajor. Nunca más esa sensación orgásmica de comerse una medialuna, de ese bombón o porción de torta. Creo que ni siquiera el helado me va a llamar la atención.
¿me estaré poniendo viejo?
Creo que hay un antes y un después de este alfajor. Nunca más esa sensación orgásmica de comerse una medialuna, de ese bombón o porción de torta. Creo que ni siquiera el helado me va a llamar la atención.
¿me estaré poniendo viejo?
Hace algunos años, en un curso de fotografía, me enseñaron que los colores son relativos. No sólo relativos a la luz que se refleja en ellos ni a quien los mira sino también a los otros colores que lo rodean. Esto se llama contraste y es algo aplicable a casi todo, maravilloso. Supongamos que se nos ocurre una escena: chabón estrella (creo que es la primera vez que escribo este verbo) guitarra contra espejo. Si uno escribe que alguien va rompiendo cosas en un frenesí de destrucción y entre esas acciones está nuestra escena, va a ser una más de las acciones enumeradas. Pero si se escribe que el chabón está tranquilo escribiendo un tema y de pronto estrella la viola contra el espejo, esa acción va a quedar resaltada por el contraste. Hay quienes hicieron del contraste todo un arte.
Por lo general estoy de buen humor y feliz. Hay muchos textos en este blog que demuestran lo contrario. Lo que sucede es que las pocas veces que estoy triste y enojado contrasta tanto con el resto que me sorprende y quiero dejar registro de eso. Ayer, el calor me puso de un mal humor horrible. En el ámbito de las relaciones humanas, mi mal humor consiste en no querer hablar con nadie porque mi nivel de paciencia es casi nulo. Como no tengo ganas de enojarme opto por insularme . Pero la gente, tal vez extrañada por este evento tan particular, empieza a hacerme preguntas de por qué estoy de mal humor, ¿estás bien?, ¿qué te pasa?, pero contame, ¿por qué no me contás? ¿POR QUÉ NO SE VAN A LA PUTA QUE LOS PARIÓ? En fin, por suerte hoy no hace calor y estoy contento.
Por lo general estoy de buen humor y feliz. Hay muchos textos en este blog que demuestran lo contrario. Lo que sucede es que las pocas veces que estoy triste y enojado contrasta tanto con el resto que me sorprende y quiero dejar registro de eso. Ayer, el calor me puso de un mal humor horrible. En el ámbito de las relaciones humanas, mi mal humor consiste en no querer hablar con nadie porque mi nivel de paciencia es casi nulo. Como no tengo ganas de enojarme opto por insularme . Pero la gente, tal vez extrañada por este evento tan particular, empieza a hacerme preguntas de por qué estoy de mal humor, ¿estás bien?, ¿qué te pasa?, pero contame, ¿por qué no me contás? ¿POR QUÉ NO SE VAN A LA PUTA QUE LOS PARIÓ? En fin, por suerte hoy no hace calor y estoy contento.
Tuesday, November 14, 2006
Es así. Para que vea alma en las cosas que escribo, tiene que ser algo que me toque de cerca, algo que pueda sentir, dolor o alegría, pero sincero y real. Soy conciente de que es imposible separar el el texto del autor, pero mi caso ya es demasiado. Ahora escribo el cuento de un cocinero y no hay forma de hacerme creer que yo no soy ese chabón y que su viejo no es mi viejo. No importa cuánto traslade las acciones, los personajes y la geografía, esa historia es mi historia. Hay algo de pelotudo en todo esto. Esa necesidad de mostrar el diario íntimo que nunca tuve y hacerme el que no me importa. Tal vez porque estoy seguro que a todos les pasa las mismas cosas que a mí. Tengo la certeza de que leer una idiotez que se pensó en una tarde de cerveza crea una conexión entre las personas. Todos piensan esas boludeces, me digo y es como el permiso que necesito para escribirlas. Pero la verdad es que nunca pregunté si a los demás les pasa. Tengo miedo a preguntar. Tal vez me encuentre real y sinceramente solo.
Wednesday, November 08, 2006
Yo sé que tengo mucha suerte. Tal vez demasiada. Mi pereza se apoya en una buena fortuna exagerada. Inmerecida, incluso. ¿Se acuerdan de esa tira de Miguelito que está sentado en el cordón de la vereda? ¿Qué hacés ahí?, le pregunta Mafalda. Espero algo de la vida, dice Miguelito. Bueno, tengo la impresión de que hice eso gran parte de mi vida y por alguna razón la fortuna siempre ha caído al alcance de mi mano (un paso más allá ya sería demasiado lejos). Es cierto que algo de mi buena suerte está alimentada por unos pocos arranques de voluntad y valentía, pero no hay forma de justificar lo que me sucede por esos actos. Todo esto me regala una paz inmensa, un horizonte de puro prado. Aunque, claro, no se vayan a pensar que quita ni uno de los mambos que rokean en mi cabeza.
Ustedes dirán, ya te van a cobrar todas juntas a vos. Pero no, no creo.
Ustedes dirán, ya te van a cobrar todas juntas a vos. Pero no, no creo.
PD: Tal vez, una temporada de mala suerte me haría reaccionar, haría nacer en mí una fuerza de voluntad descomunal. Aunque ahora que pienso, eso también sería parte de mi buena suerte. No puedo evitarlo.
Tuesday, November 07, 2006
Sí, así es, nos olvidamos de pagar la luz y estuvimos una noche enganchados a la luz del ascensor. No puedo creer que seamos tan colgados. Hasta habíamos dejado la cuenta pegada a la heladera para no olvidarnos. Pero no hubo caso, nada puede contra nosotros. Nunca nos vencerán.
PD: cuando vuelva la luz, volverán las fotos y las crónicas. Ahora voy a aprovechar para leer.
PD: cuando vuelva la luz, volverán las fotos y las crónicas. Ahora voy a aprovechar para leer.
Friday, November 03, 2006
Ayer tuvimos tarde de chocolate especiado. Incluyó clavo de olor, laurel, menta, canela, aniz, pimienta, café, miel, sal, azúcar y el ingrediente principal (léase: chocolate, amigos, buena onda y otros etcéteras importantes)
Quedó de puta madre. Lejos, el mejor chocolate, líquido o sólido, que haya probado en mi vida. Un placer que te reubicaba en el universo, que te quitaba los anteojos que se te imponen para ver una realidá simple y feliz. Claro que ahora la realidá es de goma.
PD: la foto no sé a qué viene pero es linda, ¿no? Estaba escribiendo un cuento para la foto pero todavía no queda bueno. Ya lo corijo y lo subo con otra de la misma serie.
Thursday, November 02, 2006
Nueva inquilina en casa. ¿Quién? ¿Quién es?, se preguntarán. Una amiga necesitaba un lugar donde quedarse unos días, si dijera eso no estaría faltando a la verdá. Si les digo que es la persona que más quiero, también sería sincero. Y ahora les digo que es Andrea (en la novela inconclusa), Ariadna, Ari, mi ex.
Subscribe to:
Posts (Atom)