Tuesday, December 02, 2008

Para amigarme con la literatura yanqui, que, a pesar de los yanquis, es mucha y buena, estoy releyendo algunos cuentos de Cheever. Cada vez que lo leo, es mejor. Que groso Cheever, pordió. Logró que ahora quiera buscar otra traducción, o tal vez la versión original, de "Por quién doblan las campanas".
A veces no puedo creer que Cheever, Hemingway, Carver, Donleavy, Salinger, Melville, Faulkner y tantos otros sean yanquis y al mismo tiempo cuando los leo no puedo creer que sean tan yanquis.
Me maravilla ver cómo en los resquicios, recovecos y fisuras de esa sociedad plástica nacen buenos artistas, como esas plantas que surgen de las paredes, que niegan el concreto hasta ridiculizarlo.

Será que el señor Deleuze tenía razón:
"La creación es un acto de resistencia."

3 comments:

Anonymous said...

que linda la comparacion con las plantas naciendo de paredes

Anonymous said...

tal cual esa imagen lo es todo.

{ maría } said...

cever es increíble.
leiste el del señor que toma clases de piano? pordió.
coincido, cómo todos eso americanos, norteamericanos
bss
maria