Conozco gente que siempre está a cinco centímetros de la realidad, otra que está pegada, que no logra discernirse de la realidad, y yo que me siento a ochenta kilómetros de lo que supongo puede llegar a ser las afueras de la realidad. No sé, sospecho que está ahí en algún lugar pero al parecer no me preocupa llegar a ella. No me preocupa nada de nada, la verdá. De a poco voy adoptando una forma particular de nihilismo. Un nihilismo matoso.
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3 comments:
woooooooooow qué foto bellísima.
¿Cuándo empezás a dictar cursos de nihilismo matoso? Yo me anotaría.. con estar a 10 km de la realidad, me conformo
PRECIOSA FOTO!
muy linda foto, y qué lo parió estamo hechos del mismo palo nihilista, a mi tampoco me importa nada de nada
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