Día 8:
"Estoy desayunando mate con facturas. No sé qué onda, pero acá las hacen enormes y muy livianas. Vienen como apunadas. Los demás desayunan nesquick, será algo de marplateneses, no sé. Mientras, la mamá de Miguel está haciendo humitas. Dice que hay que empezar a prepararlas un día antes, así que esto es para mañana, para el día de San José y como su marido, el papá de miguel, es carpintero es especialmente especial. Los marplateneses se dicen Tito y Richard, a todo el mundo llaman así y no es que sean sus nombres. Es una forma de llamar a los amigos. Me gusta eso. Creo que me caen bien los marplateneses. Además, imagínense, son gente que se la pasan aguantando a gente insoportable, durante tres meses seguidos. Bueh, mejor me termino el desayuno que voy a perder el bondi"
"Día largo. De esos días que mejor me quedaba en cama. En fin. Hoy fui a Uquía. Un pueblito acá cerca de Humahuaca. Me dijeron que había unos paisajes muy lindos así que me tomé un bondi y me bajé en un pueblo que no era mucho más que una iglesia y unas casas. Miguel me había contado que la iglesia era interesante porque había detalles que había dejado los obreros indígenas al contruirla, detalles que eran para ellos. Una forma de resistencia, como diría Deleuze. Pero la iglesia estaba cerrada. Así que empecé a caminar hacia el Cerro de las señoritas. Caminé, escalé, caminé, trepé y así. Claro que me perdí. Pero no importaba, estaba disfrutando el paseo. Tanto que de mirar como un boludo el paisaje, tropecé con un cactus. Me dolió como la puta madre. Me miré el pie y mi zapatilla de cuero estaba atravesada por montón de espinas. Parecía un puercoespín. Saqué todas las espinas pero cuando di dos pasos me seguía doliendo. Me quité la zapatilla y la media: en el pie, todas las puntas de las espinas. Hijas de puta. Estuve bastate rato tratando de sacarlas pero me quedaron tres adentro. Cuestión que tuve que bajar la montaña con esas espinas clavadas. Dolió bastante."
"Llegué a Otro Mundo, Miguel estaba tomando cervezas con un amigo, "el chato". Tomamos algunas cervezas mientras trataban de quitarme las espinas. Escarbaron pero no había caso. Después me fui al hospital. Escarbaron un poco más pero tampoco pudieron sacarlas. Me dieron unas hojas de alguna planta medicinal. Me dijeron que me pusiera las hojas sobre donde estaban las espinas, que mañana van a salirse solas. Veremos. Volví al hostal. Escabié de lo lindo mientras charlaba con el Chato. Hablamos de muchas cosas. El tipo parecía copado pero dejaba sentir un resentimiento profundo. Resentimiento hacia los blancos, claro. Y claro que no es para menos. Pero igual era una oscuridad con la que no me sentí cómodo. Llegó a decirme que tenía clavada las espinas porque no respetaba al indio."
Día 9:
"Escabiamos de lo lindo hasta que me dio bajón y me fui a buscar empanadas. Debo haberme comido como una docena. Mi hígado me pidió el divorcio y estoy en cama desde entonces. Sólo salí a la calle para comprarme ojotas pa poder caminar. Por cierto, esas hojas no sirvieron para nada. Creo que tengo fiebre. La verdad que estoy patrás."
"Confirmado, tuve fiebre. Dormí todo día en el caldo de mi propia transpiración. Me clavé un par de tafirol y ahora estoy un poco mejor. Estoy sentado en la mesa de un restaurante cheto, a la espera de mi guiso de quinoa. Acá, en la otra mesa, hay una chica comiendo sola, parece simpática. Podría hablarle. Pero, la verdad, ni ganas tengo."
"Acerca de la inteligencia. Debería entender de una vez por todas que la inteligencia no es ninguna virtud. Por ejemplo, este tipo, el Chato, se nota que es muy inteligente pero parece que no le sirve de mucho. Bueh, a decir verdad, a mí tampoco. Yo creo que soy inteligente pero no logro aplicar esa inteligencia en la realidad. Supongo que lo que realmente es valorable es la sabiduría, que vendría a ser la experiencia procesada por la inteligencia y aplicada en la realidad. Bueh, de eso no tengo nada. Lo malo es que a veces me encuentro juzgando a la gente por lo que yo creo que es la inteligencia. O sea, una pelotudez. Por cierto, este lugar cheto es un afano."