Friday, August 31, 2007

Sisisi, ya tengo mi entrada de Calle 13. A bailotear se ha dicho.

Mi tema preferido: La jirafa.


Thursday, August 30, 2007

El otro día subimos con amrai a la terraza. Había una luna llena increíble, brillaba en todo el cielo. La ciudad parecía iluminada de un gris azulado que le daba a todo un color de conjuro, como si Buenos Aires no fuera más que un hechizo. Pero lo que más me gusta de la luz de luna es la sombra que poryecta. A pesar de la falta de contraste, los contornos parecen más definidos y si, uno se pierde unos segundos en aquella negrura, las sombras ganan volumen. Y una sombra de tres dimensiones es algo que sólo me puede maravillar.

Wednesday, August 29, 2007

ay ay ay

Esperanza Spalding



PD: gracias vix.

Tuesday, August 28, 2007

Terminé de leer Los tres estigmas de Palmer Eldrich de Philip K. Dick y no me gustó. Pienso que el libro es bueno pero creo que ése el problema: uno lo lee pensando. Las ideas están buenas, los personajes están bien aunque a veces les falta algo de profundidad, algunos pasajes son gloriosos. Pero le falta algo. Todos los elementos están atados a un mecanismo racional, sin dejar que nada más se involucre en la historia. Tal vez se le escapa algo de paranoia, incomodidad que él mismo sufría, pero sin dejar de masticarla en cada parpadeo. Como si el tipo padeciera de insomnio y se pasara noche tras noche pensando y nada más que pensando, con los dientes apretados.

Lo que saco de esta lectura es la confirmación de que hace un tiempo elegí un camino en mi literatura, la que leo y la que escribo. Necesito sentir algo para que un libro me guste; no me alcanza si las palabras sólo llegan a mi mente.
juan y pau

"Juan y Paula"


El otro día, después de charlar acerca de escritores que en sus últimos años se hicieron unos fachos aborrecibles, llegamos a una conclusión: la única forma de crecer sin avejentarse es luchar día a día para no convertirse en un garca.

Sunday, August 26, 2007

Paula está cruzando el océano con su novio, Juanje. Fuimos al aeropuerto a despedirlos. Es extraño, pero no estuvo triste ni nada. No sé, creo que nos estamos acostumbrando a que nuestra amistad sea así: banda ancha pero wi-fi.

Vicky le regaló a Paula una foto donde estamos todos, foto que no conocía y que ayer vi por primera y, supongo, por última vez. La miré mucho tiempo. Me sorprendió algo: somos todos lindos. Vicky dice que es porque nos queremos. No sé. La foto es linda y se nota el cariño, sí. Pero además somos todos lindos. No sabía eso.
El otro día con un alumno hablábamos de combinaciones que garantizan el éxito: banana con dulce de leche; empanada y vino; cerveza y papas firtas; negro y rojo; directo de izquierda, directo de derecha, cross de izquierda; pared, centro atrás y gol, y así. Claro, llegamos hasta las minifaldas escocesas de tablitas (que combinan con todo) y me recordó la existencia de una banda que vivió el fulgor de un tema: t.A.T.u. ¿Se acuerdan?
Cierto es que la capacidad de razonamiento de los tipos es algo limitada pero nos hacen trampa si se presentan con estos elementos: dos adolescentes rusas, rubia y morocha, uniforme de colegialas, lluvia torrencial, beso en primer plano. Difícil era que no fuera un éxito.
Además, el tema me gusta.



PD: ahora me doy cuenta de que después de hablar de tatu, ni pensamos en una combinación literaria.

Saturday, August 25, 2007

A veces me da la sensación de que podría escuchar sólo stevie wonder por el resto de mi vida y ser feliz. El tipo no sólo toca el piano, el bajo, la batería y la armónica (uno de mis armoquistas preferidos), no sólo compone como la puta madre, no sólo canta con toda el alma, sino que además tiene tanta onda que la interné se raja al medio:

Master Blaster


Con gilberto gil


Friday, August 24, 2007

Frase y descubrimiento de la noche:

"- Somos pollerudos porque somos feos. "

Thursday, August 23, 2007

Tomás no quiso acompañar a su madre al almacén, ni siquiera cuando le prometieron un alfajor de recompensa. No era que el alfajor le hubiera dejado de gustar sino que hacía unas horas, en la terraza, había visto a su gata Ninja saltar de una pared a otra. Entre las paredes, además de dos pisos de vacío, había todo lo que Tomás veía en las películas. Como Ninja, Tomás se subió donde su madre apilaba los baldes, después otro paso por el cantero con macetas, un paso más en la enredadera y al fin llegó a lo alto de la pared. Su gata lo miraba desde el otro lado. Se puso en cuclillas para tomar más carrera, se impulsó con las piernas, pero al dar el primer paso tuvo que esforzarse para no perder el equilibrio. Así, balanceándose, llegó hasta el borde. Saltó pero no había conseguido velocidad suficiente. Los dos pisos digirieron su cuerpo hasta que chocó contra las baldosas. Se levantó, miró su ropa sucia de sangre y se sentó en un escalón. La madre llegaría pronto, no había mucho tiempo. Limpió las baldosas lo mejor que pudo, se lavó las heridas y trató de quitar las manchas de sangre de su remera, pero no logró más que expandirlas. Mientras buscaba ropa para cambiarse, oyó que la puerta de calle se abría. Comprendió que no había más remedio que decir la verdad. Pensó en qué podía prometer para que no le quitaran la televisión pero no se le ocurrió nada. Al fin salió a su encuentro con la sospecha de que una primera jugada de su parte mejoraría la situación. Hola, Ma. Tengo que contarte algo. Me morí. No te enojes.

Wednesday, August 22, 2007

Homenaje de un narrador a un poeta:

costanera04

"todo cielo"

Soñé que comía afuera con amigos. Por alguna razón llegaba tarde, las pizzas ya estaban servidas; algunos vinos y varias cervezas. Me senté en la silla que pidieron a otra mesa y que acercaron a la esquina de la nuestra. En el vidrio, antes de la calle, las gotas de lluvia buscaban su camino al mundo. Ella es M, dijo una amiga para referirse a la chica que se movía hacia un costado para hacerme lugar. Giré para saludarla. Aquella persona estaba hecha de cielo: algunas nubes cruzaban su cuerpo iluminado de azul inabarcable, los últimos rayos de sol rasgaban su hombro derecho y la luna ya asomaba por su cadera. Cuando me saludó, cerré los ojos para disfrutar de la brisa, para decirme no te enamores de un sueño.



Tengo que escribir un libro para este título: Tropiezos premeditados.

Sunday, August 19, 2007


costanera05

"tu mach"

Saturday, August 18, 2007

Dos momentos para cagarme a trompadas:
cuando no digo lo que pienso

y

cuando no pienso lo que digo.


Ayer, después de que yo usara posmoderno como un termino despectivo para un expresión artística, me calificaron de conservador.

Y creo que tienen razón.

helena en agua

"mañana de sábado"

Terminé de leer dos libros japoneses en el mismo día: Mil grullas de Kawabata y Una cuestión personal de Oe. Me gustaron los dos pero: para el primero necesito un entendimiento más profundo de la cultura japonesa y de su ceremonia del té; el segundo es la primera novela japonesa que leo que termina bien y eso no me gustó.

Me extiendo con el libro de Oe y el que no lo haya leído no lea más. Está bueno que el tipo, después de buscar una forma de escaparse de su hijo, después de hundirse y estar a punto de zafarse, elija hacerse cargo de la situación. Lo que me parece que no funciona es que después de la operación, se haga expreso que el nene tiene la posibilidad de tener una vida normal y feliz. Tal vez, si se hubiese dejado la duda, una duda con esperanza (por ejemplo terminarlo cuando el doctor entra a la sala de cirugía), me gustaba más, porque de esa forma el protagonista se estaría haciendo cargo a pesar de saber también que lo más probable es que se condene con esa decisión. Me dejó la sensación de que al final se lo premia por hacerse cargo, algo que no funciona con el resto del argumento.

Ahora que pienso, me desagrada el gusto a moralina que te deja en la boca. La misma moralina de la que algunos me acusan.

Thursday, August 16, 2007

Frase de la noche:

" - Pero señor, he visto clítoris más largos que eso."

Wednesday, August 15, 2007

Hoy por la mañana terminé El entenado y una vez más Saer me deja con la sensación de ¿y? De todas formas, el libro me gustó. El problema es que no logro sentirlo. Mi lectura no fueron más que procesos intelectuales en los que los sentimientos apenas se asomaron. Me gustaron muchos pasajes, en especial cuando habla de la lengua de los indígneas, como el que cuenta que dudaban tanto de la existencia misma del universo que no tenían el verbo ser o estar sino sólo parecer. Lo cuenta de una forma tan contundente que uno mismo se convence de que estos tipos tienen razón. Tengo que reconocer que la prosa es exquisita y que la idea motora del relato está muy bien pero a mí no me alcanza. Necesito sentir más al personaje.

Tuesday, August 14, 2007

desayuno alemán

Con Amrai quedamos que una vez por semana, mientras escuchamos los beatles, vamos a tener un desayuno alemán: cereales, fruta y avena, café, té y jugo de naranja recién exprimido, tostadas y queso. Me pareció una fórmula efectiva para ser feliz.

Monday, August 13, 2007


colores01



No tengo idea de por qué me levanté a las siete de la mañana. Encima, mis dos alumnos de hoy postergaron sus clases así que no tengo obligaciones hasta las dos de la tarde. Cinco horas para dedicarle a Saer y a Kawabata.

Una vez más, en El Entenado, Saer demuestra lo groso que es y aún así no me termina de gustar. Es que los protagonistas de Saer pocas veces son realmente protagonistas de sus novelas, ese rol lo cumple más que nada la prosa impecable del tipo. Muchas veces da la impresión de que los personajes están ahí sólo para ver lo que Saer quiere contar y eso me hincha las pelotas. Claro, soy de esos anacrónicos que les gusta las novelas centradas en personajes. Y también, me canso de tener que buscar los sujetos de sus oraciones de diez líneas.

Mil grullas, pequeña novela de Kawabata, es un despliegue de japonesidad. Tiene estas relaciones cruzadas que tanto gusta este autor y que tan bien le sale. Ahora que pienso, Old Boys también tiene algo de esto pero en kawabata no está forzado. Tal vez porque no espera hasta el final para develar la trama de relaciones. La necesidad de una última escena explicativa es lo que me molesta de la película coreana. En cambio, en Mil grullas, uno puede ver cómo se van formando la trama de relaciones y cómo pesan las miserias, los deseos y la humanidad de los personajes.

Thursday, August 09, 2007

amrai a cuadros

"Como las cosas que nunca se alcanzan"

Hace unos días saqué esta foto. Ahora la veo y me doy cuenta de que sería mucho mejor si algo rompiera el encierro del marco: por ejemplo, si Amrei tuviera el brazo levantado hacia el cuadrante superior derecho y la mano presionada contra el vidrio. Podría sacar otra vez la foto y pedirle que levante el brazo pero, a diferencia de corregir un cuento, corregir una foto no me entusiasma mucho. Voy a pensarlo, tal vez si cambio el modelo haga la otra foto.

Wednesday, August 08, 2007

Ayer vi Old Boy, una buena película coreana. Hay muchas cosas buenas: el protagonista (el personaje y la actuación son increíbles), algunas líneas del guión y varias escenas exquisitas. Lo que me pareció más logrado fue la bronca que transmite el personaje. Descarga una violencia que poco tiene que ver con las películas de artes marciales. Acá no se trata de movimientos agraciados ni precisos; este tipo quiere lastimar.
Una vez más, me gusta que no haya buenos ni malos, que la historia se apoye en la búsqueda del protagonista.
No me gustó el final. Y lo malo es que los finales influyen demasiado sobre la calidad de las películas. Muchas veces historias masomenos pero que tienen un buen final me dejan una sensación agradable. En cambio, un mal final después de hora cincuenta de buena película te puede arruinar todo. ¿Qué onda? ¿Por qué pesan tanto esos últimos diez minutos, esas últimas páginas, esas últimas semanas de una relación? En fin, les dejo una escena:


Hoy me desperté a eso de las siete y remolonié en la cama hasta las ocho. Me levanté, fui al baño y me preparé café. Mientras desayunaba me invadió una felicidad particular, que no sentía hace como como diez años. ¿Se acuerdan cuando se levantaban un martes agarraban la mochila y salían para el colegio? En el subte, todo lo que no había hecho para ese día, el trabajo que no iba a entregar, las cosas que no había estudiado, los días que faltaban para terminar la semana martilleaban mi alma. Llegaba a estación Catedral, caminaba las tres o cuatro cuadras en un microcentro desolado, acompañado por otras sombras con mochilas. Cruzaba avenidas sin tránsito, sin sol. Avanzaba por Bolívar en una corriente a la que cada vez se sumaban más caras dormidas. Pero en la esquina antes de llegar ya se sentía que había algo distinto. El amontonamiento de gente en las escaleras resquebrajaba la cáscara que se había formado; de a poco las preocupaciones se desprendían, la espalada se erguía y la mochila no pesaba tanto. El rumor ya era sólido: no había clases.
Esa es la felicidad que siento ahora.

Tuesday, August 07, 2007

Tan lejos la pensaba que era como si siempre la siguiera de atrás. Aún cuando tomábamos un mate y miraba sus ojos negros, sus labios sobre las palabras, me era imposible estar ahí. No existía realidad en la que nosotros pudiéramos estar juntos. Cada momento compartido era recuerdo o anhelo; nunca vida y presente.
En esta mañana preciosa insisto: la onda es la única forma de belleza.

Para demostrarlo les dejo a mi amigo Israel Kamakawiwo'ole.

Con un amigo pasamo la otra noche hablando de nuestras derrotas. Decidí que la conversación ya debía tomar nuevos rumbos cuando escuché este comentario:

- Al menos le mordí una teta.

Friday, August 03, 2007

amrei

Sí, uno de esos días para quedarse en casa.

Thursday, August 02, 2007

Miré por la ventana y vi a cuatro personas que llevaban instrumentos a la espera de que cambiara el semáforo. Creo que se miraron de reojo.

Eso solo me hizo feliz.
Para las almas esclavas como la mía, estoy por inventar un dispositivo autodiciplinario: el Sopapic. Este instrumento consiste en una mano del tamaño de una raqueta de tenis que, gracias a un mecánica de avanzada y su motor eléctrico de última generación, es capaz de propinarle hasta tres cachetadas por segundo al usuario. Regulable en intensidad y frecuencia, el Sopapic también puede acomodar sus dedos construidos en caucho para lograr diferentes dolores que cubren un amplio espectro: desde cachetada de revés de Arnaldo André hasta gancho de izquierda de Mike Tyson. Claro que éste último sólo sería comercializado a esclavos profesionales y certificados.


-Ponete a escribir, carajo.

Doce amigos y amigas acaban de irse de casa. A cada uno lo saludé con un abrazo sentido y afectuoso. Nos reímos mucho. Siempre pensé que compartir el sentido del humor o, al menos, los mismos códigos para el humor era indispensable para la amistad. Me hubiese gustado sacar alguna foto pero estuve ocupado.

Me hizo feliz ver a Paula feliz con nosotros.

Wednesday, August 01, 2007

Hay una historia que alguien escribió, filmó o me contó y que yo vi, leí o escuché que creo que viene así:

Un tipo ambienta una cabaña como si fuera del lejano oeste. Se fija en cada detalle y no deja ni rastro de algo que pudiera darle indicio de que en realidad vive en otra época. Así se pasa los días, haciendo tareas que serían del lejano oeste, hasta que sale de la cabaña y se encuentra en el lejano oeste. Vive un par de idas y venidas, chica incluida, hasta que un día llega con la chica a la cabaña dispuesto a ponerla. Empiezan a desvestirse y la mina le pregunta ¿qué es eso? El tipo se mira la muñeca, ve su reloj pulsera y se da cuenta de que no está en el lejano oeste. Y la mina desaparece.

Bien, tal vez soñé la historia, no sé, pero ésta fue la primera vez que comprendí que la percepción de las cosas determina la realidad.

Todo esto para contarles que ayer llegaron Martín y Paula, dos amigos de mi corazón. Verlos a los dos juntos me provocó un pequeño viaje al lejano oeste. Me había olvidado cuánto los quiero. Me siento de veinte años y por suerte no uso reloj.