Thursday, July 24, 2008

Mientras caminaba por su barrio, Eduardo pensaba en qué iba a gastar las doce balas que cargaba la nueve milímetros que llevaba en el bolsillo. Había que ser cuidadoso porque no tenía forma de conseguir más municiones. Al principio claro que había anhelado llegar hasta los hijodeputas célebres pero aquella fantasía le duró hasta terminar el café con leche. Debía ponerse objetivos alcanzables. Más factible era tomarse un bondi hasta Puerto Madero y elegir entre la abundancia de garcas pero, debía reconocerlo, le daba tremenda fiaca tener que cruzar el microcentro. Se dijo que ya era la hora pico y que no valía la pena, que garcas había en todos lados. Para que la ansiedad no lo traicionara, entró a un bar. Pidió una gaseosa, un tostado y el diario. Estaba seguro de que leer las noticias le daría gran inspiración pero como siempre empezó por los chistes. De pronto, mientras terminaba el primer triángulo, se preguntó si este mundo de mierda merecía su generosidad; ¿por qué no podía gastar las balas que él había comprado en las personas que ahondaban su tristeza? Trató de espantar aquel pensamiento pero era tarde, el egoísmo ya se había instalado. Bueno, se dijo, cinco balas para mí y siete para la humanidad. Una resolución más que justa. Pensó primero en las cinco balas. No tardó en darse cuenta de que no eran suficientes, tan sólo en ese bar ya sobraban candidatos. Reconoció la pesadez en todo su cuerpo, el cansancio que le llegaba como primer síntoma de depresión. Debía hacer algo pronto. Levantó el brazo y apretó el gatillo. Una mujer toda pintada de rojo empezó a gritar mientras su amiga caía al piso. De pronto, Eduardo se sintió lleno de energía. Se puso de pie, dejó un billete de veinte y salió a la calle. Todavía dudaba de contar aquella bala como de la humanidad o propia. En un acto filantrópico, la contó como una de las suyas. Su propia generosidad lo hizo feliz. Miró el arma y a su alrededor. Paró un taxi. A Puerto Madero, dijo. En la radio sonaba Radio 10.

4 comments:

Anonymous said...

gud

Anonymous said...

purista hinchapelotas dice: hay 9 mm de 12 tiros? creo que no.
a menos que solo cargues 12 balas en una cargador de 13, de 15 o de 17.

Mata said...

p h p: tal vez eduardo guardaba la última para él, no sé, la próxima le pregunto.

paulenka said...

a la exposición rural debería haber ido.