Hoy fui a lo de mis viejos a ordenar el depósito de basura en el que, durante los últimos diez años, fue convirtiendo el el quincho de la casa. Encontré varias cosas que ni siquiera recordaba, entre ellas: un reloj, un teg, un inflador de ruedas de bicicleta, un poster de Yoda y varias fotos.
La maldita nostalgia se me enredó las piernas y choqué de frente contra algo duro. En fin.
De todas formas, lo que quería comentar es algo acerca de la magia. Me di cuenta de que las cámras analógicas, las viejas y queridas 35mm, captan mejor la magia de la imagen. Hay algo que a las digitales se les pierde y no sé bien qué es. Algo de la luz, no logran ver esos hilos en la luz, no logran captar la textura de la luz. Las putas cámaras digitales nos hacen creer que la luz no puede tocarse. Y eso es triste.
PD: sí, lo sé, monotemático. En esa época, cinco, seis, siete años atrás, yo era monotemático.
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4 comments:
Las cámaras digitales no saben lo que son las imagenes porque la descompenen en millones de fragmentos y el momento queda así, perdido para siempre.
Muy buenas tus fotos.Me ecantaron
genial la explicacion de uncle greg! le agrego el problema geométrico: los millones de fragmentos son siemrpre cuadraditos. El bromuro de plata (si mi memoria no me falla respecto de la composición química)lo hace parecido pero con el grano, que ya implica una concepción morfológica absolutamente diferente, y también una forma de agruparse muuuy distinta
igual los escanners tampoco terminan de trasmitir eso que vos decis
Quiero agregar algo a lo que dice Oveja. Las partículas químicas además de tener todas formas diferentes se agrupan de forma desordenada. Éste caos hace que el ojo no pueda distinguir ningún tipo de patrón en la imágen, creo que por eso nos da una sensación diferente.
Es cierto que el puto scanner me arruina todo una vez más, pero era una paradoja que no supe resolver.
Y sí, se llama bromuro de plata.
ahora también sos monotemático...si no con las fotos, con otras cosas
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