Ayer vi varios capítulos de los Simpsons, sí, desde que descubrí que pueden verse online no puedo parar. Vi uno que se llama La herencia de Mona. Tal vez estaba demasiado sensible, no sé, pero sentí como si se me cayera el corazón. Fue algo físico. Lo sentí en todo el cuerpo, un electroshock de vacío que te deja las manos medio dormidas, cosquilleando de angustia y tristeza.
Después el capítulo resuelve bien pero no logró quitarme la sensación.
Friday, January 30, 2009
Thursday, January 29, 2009
De chico me preguntaba por qué era tan fácil saber cuando uno estaba despierto y tan difícil entender que algo era un sueño. Mi hermana, toda misteriosa y con la crueldad de los adolescentes, me dijo: ¿Qué sabés si esto no es un sueño?. Y ahí me la cagó. Empecé a flashear. Pellizcate, me dijo. ¿Cómo? Que te pellizques así sabés. No, no quiero. Me daba terror decubrir que todo era un sueño. Ella se dio cuenta y empezó a perseguirme. Me acuerdo que yo corría mientras empezaba a llorar. No entendí la hijadeputez, no tanto de mi hermana sino de algunos sueños o de la realidad, hasta mucho tiempo después. En otra ciudad, me había tomado un bondi que me dejó en cualquier parte, en medio de un descampado (sí, estaba en pedo). Hacía un frío de cagarse, el asfalto sonaba a escarchado en cada paso. Creí reconocer un camino y empecé a correr. El vapor que salía de mi boca me humedecía de poco las mejillas, el viento me cortaba en los ojos. Corrí y corrí pero no parecía avanzar, el descampado era siempre el mismo. Entonces me acordé de mi hermana. Pensé en pellizcarme pero en vez de eso corrí más rápido. En algún momento, gracias al instinto del borracho, llegué a la casa donde me estaba quedando.
Ahora que lo pienso creo que nunca me pellizqué en mi vida.
Wednesday, January 28, 2009
Así empieza la historia que estoy escribiendo estos días:
"Mi mamá violó a mi papá. Un día me enteré de que mi vieja engañó a mi viejo para tenerme, para quedar embarazada de su cuarto hijo. Supongo que habrá dejado de tomar la pastilla. Claro que ninguno de los dos me lo dijo, en casa nunca se dice nada. Sólo me mostraron una carta de un amigo de ellos en la que preguntaba: ¿Éste es el hijo por el que acusaste a tu mujer de violadora?
Así nací yo."
"Mi mamá violó a mi papá. Un día me enteré de que mi vieja engañó a mi viejo para tenerme, para quedar embarazada de su cuarto hijo. Supongo que habrá dejado de tomar la pastilla. Claro que ninguno de los dos me lo dijo, en casa nunca se dice nada. Sólo me mostraron una carta de un amigo de ellos en la que preguntaba: ¿Éste es el hijo por el que acusaste a tu mujer de violadora?
Así nací yo."
Tuesday, January 27, 2009
Maté a mi vieja con mis propias manos, mi viejo me persiguió por toda la ciudad (no tenía nada que ver con la muerte de ella), anduve feliz con mis roller, los gitanos me convidaron pasteles, cada vez que crucé la calle tuve que cagarme a trompadas con alguien, me morí en una estación de tren, me morí en plena calle, me morí en mi propia cama, me morí en una pileta vacía, cogí con una chica que me gustaba pero que no existía (ni siquiera en el sueño), cogí con otra chica que no me gusta (ni siquiera en la realidad) . Y cada día me despierto sólo para volver a dormirme.
El pueblo bolviano votó esta Constitución:
"En tiempos inmemoriales se erigieron montañas, se desplazaron ríos, se formaron lagos. Nuestra amazonia, nuestro chaco, nuestro altiplano y nuestros llanos y valles se cubrieron de verdores y flores. Poblamos esta sagrada Madre Tierra con rostros diferentes, y comprendimos desde entonces la pluralidad vigente de todas las cosas y nuestra diversidad como seres y culturas. Así conformamos nuestros pueblos, y jamás comprendimos el racismo hasta que lo sufrimos desde los funestos tiempos de la colonia.
El pueblo boliviano, de composición plural, desde la profundidad de la historia, inspirado en las luchas del pasado, en la sublevación indígena anticolonial, en la independencia, en las luchas populares de liberación, en las marchas indígenas, sociales y sindicales, en las guerras del agua y de octubre, en las luchas por la tierra y territorio, y con la memoria de nuestros mártires, construimos un nuevo Estado.
Un Estado basado en el respeto e igualdad entre todos, con principios de soberanía, dignidad,
complementariedad, solidaridad, armonía y equidad en la distribución y redistribución del productosocial, donde predomine la búsqueda del vivir bien; con respeto a la pluralidad económica, social, jurídica, política y cultural de los habitantes de esta tierra; en convivencia colectiva con acceso al agua, trabajo, educación, salud y vivienda para todos."
(...)
"Cumpliendo el mandato de nuestros pueblos, con la fortaleza de nuestra Pachamama y gracias a Dios, refundamos Bolivia."
"En tiempos inmemoriales se erigieron montañas, se desplazaron ríos, se formaron lagos. Nuestra amazonia, nuestro chaco, nuestro altiplano y nuestros llanos y valles se cubrieron de verdores y flores. Poblamos esta sagrada Madre Tierra con rostros diferentes, y comprendimos desde entonces la pluralidad vigente de todas las cosas y nuestra diversidad como seres y culturas. Así conformamos nuestros pueblos, y jamás comprendimos el racismo hasta que lo sufrimos desde los funestos tiempos de la colonia.
El pueblo boliviano, de composición plural, desde la profundidad de la historia, inspirado en las luchas del pasado, en la sublevación indígena anticolonial, en la independencia, en las luchas populares de liberación, en las marchas indígenas, sociales y sindicales, en las guerras del agua y de octubre, en las luchas por la tierra y territorio, y con la memoria de nuestros mártires, construimos un nuevo Estado.
Un Estado basado en el respeto e igualdad entre todos, con principios de soberanía, dignidad,
complementariedad, solidaridad, armonía y equidad en la distribución y redistribución del productosocial, donde predomine la búsqueda del vivir bien; con respeto a la pluralidad económica, social, jurídica, política y cultural de los habitantes de esta tierra; en convivencia colectiva con acceso al agua, trabajo, educación, salud y vivienda para todos."
(...)
"Cumpliendo el mandato de nuestros pueblos, con la fortaleza de nuestra Pachamama y gracias a Dios, refundamos Bolivia."
Preámbulo de la Nueva Constitución Política del Estado.
Friday, January 23, 2009
Ayer íbamos por la calle a una cantina que me gusta, del Puente creo que se llama, que está por almagro, en la esquina de Rawson y Yerbal, justo cruzando el puente de la via. Es una de las pocas cantinas de barrio que quedan por acá. Una de las paredes está cubierta con un mural, una paisaje cubierto de nieve y de manchas de grasa y de humedad; en otra pared, una foto de Gardel y después ninguna otra decoración más que los pizarrones con el menú. Todo iluminado con luces fluorescentes y por las luces de la calle. Incluso la luz roja del semáforo, que a esa hora titila, ilumina un pooc. La cantina, además de ser barata, si te sentás junto a la ventana de noche, te ayuda a ver toda la magia del barrio. No sé, tengo la sensación de que desde ahí se proyecta la escencia de Almagro. Sí, claro, parece una esquina como cualquier otra, pero a cierta hora, sentado a la mesa de ese bar, te das cuenta de que no, de que esa esquina es mágica. En fin, en realidad quería contar otra cosa. Mientras íbamos caminando, a metros de llegar, encontramos tirados en la calle tres libros de Harry Potter: el el 4, el 5 y el 6. Estaban casi nuevitos, así que los agarramos. El resto de la noche nos dedicamos a conversar acerca de qué libros comprar con esos Harry Potter. La conversación fue larga y no llevó a ningún lado. Es que hay demasiados libros que faltan leer y siempre nos desviábamos a los libros que ya habíamos leído. Y a veces hablar de lo que uno conoce es más divertido que chamuyar lo que no sabe. Además yo andaba medio distraido, esperando ver no sé qué por la ventana.
Thursday, January 22, 2009
y la mañana llegó de a pedazos, como si algo se hubiera roto por la noche. Primero golpearon las ventanas. Golpes terribles. Daba miedo levantarse para cerrarlas. Entraba algo de luz, aunque afuera recién despuntara el amanecer. Los autos pasaban sin hacer ruido. La luna todavía estaba ahí. Ella también. Aunque ya habíamos decidido separarnos. Al final me levanté, cerré la ventana y salí del cuarto. Entré al baño. En el espejo vi, dos cicatrices bajaban por mis mejillas. Dos surcos por donde tendría que haber arrastrado lágrimas. Pero ahora ya todo estaba roto. Entré a la cocina y, por última vez, preparé su desayuno preferido.
Wednesday, January 21, 2009
Una vez me contaron que la fábrica de Guiness produce 9 millones de litros por día; de los cuales 5 millones son exportados y los otros 4 millones consumidos en Irlanda. Pero Irlanda tiene una población de 4 millones de habitantes. Es decir, cada irlandés toma un litro de Guiness diario. Esto es si contamos en el promedio a todas las personas que no beben y a las otras que no toman Guiness.
Irlanda, un sobrio ejemplo de birra.
Tuesday, January 20, 2009
A veces pasa que uno bebe alguna que otra copa demás, se levanta con una resaca desmedida y se queda todo el día tirado en la cama, jurando a diosito, te lo juro, si me sacás de ésta no vuelvo a tocar un vaso en mi vida. Claro que diosito nunca te saca de esos momentos, así labura el chabón, pero sí te engaña con algo de olvido. Digo te engaña porque, aunque uno no recuerde bien cómo se hizo ese corte (¿pero cómo que atravesé una ventana? ¿pero qué pasó? ¿en serio? cualquiera, soy cualquiera) ni casi nada de aquella noche, sí recuerda por el resto de su vida esa noche de la que no se acuerda nada. La vida tiene esas putadas.
Cierro los ojos, mis párpados mastican y mastican pero no hay forma de deshacer la masa que se formó. Cuando era chico a veces me metía bocados demasiados grandes en la boca y tardaba todo el almuerzo en comer uno solo, en especial si era asado. Cierro con fuerza los ojos, vuelvo a abrirlos y espero que nadie me mire, pero no hay lágrimas que escupir. El agua tampoco ayuda a tragar toda esta mierda. Cierro los párpados, con las pupilas intento disolver ese resplador que me empuja para adentro. Cuando era chico a veces comía ocho, nueve sugus a la vez y también era imposible de masticar. La saliva se acumulaba hasta ahogarme. Busco en la cocina. No hay nada. Sí, hay pan. Pan negro. Me meto un bollo entero en la boca, meto otro. ¿Entra otro más? Entra. No mastico, me seco. Cierro los ojos, me trago.
Monday, January 19, 2009
Sunday, January 18, 2009
Hoy estoy Un día perfecto para el Pez Banana de Salinger
, estoy Construcción de Chico Buarque. Las dos obras son esta misma sensación de domingo a la tarde, esta desesperación tranquila de comprenderlo todo y entonces no entender por qué todo. Tanta belleza y tanta tristeza.
, estoy Construcción de Chico Buarque. Las dos obras son esta misma sensación de domingo a la tarde, esta desesperación tranquila de comprenderlo todo y entonces no entender por qué todo. Tanta belleza y tanta tristeza.
Sentado en el rincón preferido de mi casa (a la mesa del comedor, frente a la ventana), veo un momento hermoso. No logro fotografiarlo (ni siquiera lo intento, merezco la derrota). Las luces están apagadas, la ventana abierta pero las celosías cerradas (atadas con una bolsa de plástico, para que no golpeen con el viento). La luz rayada en blanco y negro apenas ilumina la mesa: mate, termo, taza amarilla y blanca. De la calle llega el sonido de siesta, de domingo a las tres de la tarde. La bolsa de plástico se mueve en un intento de libertad y provoca una ligera sombra de pájaro.
o
A la hora de la siesta,
sombra de plástico.
Anhelo de pájaro.
o
A la hora de la siesta,
sombra de plástico.
Anhelo de pájaro.
En este momento, mi amiga Paula está volviendo a su Barcelona (hace un par de años hubiese escrito se está yendo a). A pesar de que vive cruzando el Atlántico, de que discrepamos en muchas cosas, de que a veces no nos hablamos por un tiempo y de que venimos discutiendo hace más de una década, es la persona con la que mejor me comunico, mi banda ancha con el mundo. En nuestras conversaciones comprendí muchas cosas, tal vez la más importante: la necesidad de lo inútil.
Sí, te voy a extrañar.
Friday, January 16, 2009
No sé bien qué me gusta de Robbie Williams aparte de que me gusta ser hittero y grasa. El tipo no canta tan mal, la banda que tiene es zarpada de grosa y los temas están bien. Pero no es eso. Me gusta la onda del chabón, así medio chanta y canchera. Sí, creo que es eso.
Les dejo Let me entertain you de Robbie Williams, en uno de los recitales más zarpados que haya visto (fui a verlo en river pero no fue tan groso como éste en Knebworth)
Les dejo Let me entertain you de Robbie Williams, en uno de los recitales más zarpados que haya visto (fui a verlo en river pero no fue tan groso como éste en Knebworth)
Wednesday, January 14, 2009
Una vez jugaba a la escondida con mi hermana. Ella se puso a contar y yo subí raudo (ja, la primera vez que escribo esta palabra) al baño grande (no tan grande, pero sí el más grande de la casa de mis viejos). Sin encender la luz me escondí en el espacio que queda entre la bañera y el mueble del lavamanos. Ahora lo miro y no puedo creer que yo pudiera entrar ahí. En fin. Me metí y esperé en silencio, atento al sonido de pasos de mi hermana. Pero oí a alguien más subir las escaleras, era mi viejo. Cagado de risa pensé: Ahora, mientras esté cagando o meando, salgo y lo asusto. Mi viejo entró, encendió la luz y empezó a echarse un cloro. Yo ahí, sentado en el piso, con un brazo apretado contra la madera y el otro contra la loza, no quise moverme. Había algo que me dijo mejor no. Es ese mismo algo que ahora me dice menos mal, pero no sé bien por qué. Cuando bajé, me encontré a mi hermana tomando la merienda. Como no había podido encontrarme, prefirió el nesquik.
La mirada no se forma con los ojos abiertos. No es lo que uno ve en el mundo lo que nos modifica, sino lo que vemos adentro, lo que se nos metió del mundo. Acabo de darme cuenta de esto. Por eso a veces encontramos a alguien y nos recuerda a otra persona. Tal vez ni siquiera se parecen pero la forma de hablar, de moverse y, en especial, de mirar te dicen que esas dos personas compartieron algo. Se llevaron una misma parte del mundo adentro y la miraron y la miraron y la miraron. Hasta que ya no pudieron dejar de mirar. Aunque sus ojos vean algo más o a alguien más, nunca dejan de mirar esa parte del mundo que ahora les pertenece sólo a ellos. Y cuando uno dice "hay algo de ella que me hace acordar a" en realidad está reconociendo en la mirada, en las palabras, en la voz, esa parte del mundo.
Mercy Street de Peter Gabriel y All my pretty ones de Anne Sexton
Mercy Street de Peter Gabriel y All my pretty ones de Anne Sexton
Gracias a Vix, recuperé textos que creía perdidos. Son unos quince cuentos y algunas boludeces que escribí entre 1999 y 2002. Es decir, anteriores a Gaijin y toda la bola. Cuando ni se me cruzaba por la cabeza que alguna vez iba a poder publicar algo. Y hay cosas que están buenas. Acá les dejo una de las boludeces:
Linda escribe: letras redondas que nunca pisan los renglones salvo cuando deben hacerlo. Escribe con lentitud, la birome se hunde para crear un surco negro en la hoja de su diario íntimo, tapas rosadas y pequeño candado. Escribe que está enamorada de Martín, su hermano mayor, y que pronto Martín se enamorará de ella. Y al poner el punto al final de esta frase el papel cede ante la presión para crear un pequeño orificio en la hoja.
Linda baja cuando la llaman a comer, sólo tres platos sobre la mesa. ¿Y Martín?, pregunta. Su hermano cenará afuera. Ella dice que no tiene hambre, que debe estudiar para el examen del martes y sube a su habitación. Abre una de las puertas de su armario de madera pintada con calcomanías y posters de sus cantantes preferidos, quita dos cajas del segundo estante para buscar su diario. La llave que cuelga de su cuello abre el candado. Linda escribe: letras que se enroscan en los renglones. Escribe y la birome tacha y vuelve a escribir: Martín es un estúpido, lo odio; odio a Martín, que es un estúpido; Martín estúpido odio. Llena dos hojas con combinaciones de estas tres palabras hasta que su hermano detiene el auto en la puerta de la casa. Lo espera en el pasillo que da a su habitación. Martín pasa junto a ella, olor a cigarrillos, a alcohol y a perfume de mujer, y se encierra en su cuarto. Linda intenta abrir la puerta, empuja con fuerza pero a pesar de los golpes y gritos no logra que ni su hermano ni la puerta cedan. La hoja de su diario recibe líneas que se cruzan en ángulos cerrados, surcos negros que a veces rompen el papel y continúan en la hoja de abajo. Cuando la birome se rompe, Linda se calma. Arranca la primera hoja, la segunda y todas las demás hasta quedarse con una sola. Letras redondas que flotan sobre los renglones escriben con lentitud: Martín me quiso violar. El diario de tapas rosadas posa, sin candado, sobre el piso de madera del pasillo.
Linda escribe: letras redondas que nunca pisan los renglones salvo cuando deben hacerlo. Escribe con lentitud, la birome se hunde para crear un surco negro en la hoja de su diario íntimo, tapas rosadas y pequeño candado. Escribe que está enamorada de Martín, su hermano mayor, y que pronto Martín se enamorará de ella. Y al poner el punto al final de esta frase el papel cede ante la presión para crear un pequeño orificio en la hoja.
Linda baja cuando la llaman a comer, sólo tres platos sobre la mesa. ¿Y Martín?, pregunta. Su hermano cenará afuera. Ella dice que no tiene hambre, que debe estudiar para el examen del martes y sube a su habitación. Abre una de las puertas de su armario de madera pintada con calcomanías y posters de sus cantantes preferidos, quita dos cajas del segundo estante para buscar su diario. La llave que cuelga de su cuello abre el candado. Linda escribe: letras que se enroscan en los renglones. Escribe y la birome tacha y vuelve a escribir: Martín es un estúpido, lo odio; odio a Martín, que es un estúpido; Martín estúpido odio. Llena dos hojas con combinaciones de estas tres palabras hasta que su hermano detiene el auto en la puerta de la casa. Lo espera en el pasillo que da a su habitación. Martín pasa junto a ella, olor a cigarrillos, a alcohol y a perfume de mujer, y se encierra en su cuarto. Linda intenta abrir la puerta, empuja con fuerza pero a pesar de los golpes y gritos no logra que ni su hermano ni la puerta cedan. La hoja de su diario recibe líneas que se cruzan en ángulos cerrados, surcos negros que a veces rompen el papel y continúan en la hoja de abajo. Cuando la birome se rompe, Linda se calma. Arranca la primera hoja, la segunda y todas las demás hasta quedarse con una sola. Letras redondas que flotan sobre los renglones escriben con lentitud: Martín me quiso violar. El diario de tapas rosadas posa, sin candado, sobre el piso de madera del pasillo.
Tuesday, January 13, 2009
Una vez vi a un ángel. Son fáciles de reconocer. Por ejemplo, cuando se acercan a preguntarte la hora o una dirección, no es que vengan volando, ni siquiera llevan alas. Uno los reconoce en el propio cuerpo. Primero, las palabras que querés decir jamás salen de tu boca y ni hablar de los movimientos. Creo que los ángeles deben llevar una vida algo frustrante.
Ángel: - ¿Disculpame, no sabés qué me lleva de acá a Flores?
Uno: - Abladba...db...ñaentr...
Ángel: - ¿Cómo?
Uno: - dbba..traey..uuuuu...iiiii....aaaaa...
Entonces el pobre ángel se va siempre algo desorientado por la estupidez del pobre mortal. Pero la puebra irrefutable de que encontraste con un ángel es que cuando se van medio puteando los pies de uno ni siquiera tocan el piso y el primer paso de vuelta al mundo es como bajar de un escalón.
Ángel: - ¿Disculpame, no sabés qué me lleva de acá a Flores?
Uno: - Abladba...db...ñaentr...
Ángel: - ¿Cómo?
Uno: - dbba..traey..uuuuu...iiiii....aaaaa...
Entonces el pobre ángel se va siempre algo desorientado por la estupidez del pobre mortal. Pero la puebra irrefutable de que encontraste con un ángel es que cuando se van medio puteando los pies de uno ni siquiera tocan el piso y el primer paso de vuelta al mundo es como bajar de un escalón.
Euge dice que estar buen@ te llega en una época, si tenés suerte. Hay gente que es hermosa de bebé pero después, pobrecita, dice Euge, es un monstruo. Hay otra que de chicos son una pelota pero después mejoran mucho. Hay tipos que empiezan a estar buenos recién cuando llegan a los 40. Hay mujeres que nunca estuvieron buenas pero cuando son abuelas se mantienen mucho mejor que el resto de su generación. Todo esto, aclara Euge, sólo si se tiene suerte. Tal vez por piedad al resto de los mortales, no aclaró qué le sucede a la gente no tan afortunada.
Monday, January 12, 2009
Era sábado a la tarde de una primavera que recién empezaba. Los árboles todavía estaban desnudos y aquel día hacía un frío de cagarse. Alo Matiz, ¿estás ocupado? Claro que no, para ella (vamos a llamarla Andrea aunque no sea la misma Andrea de siempre) nunca estaba ocupado. Nos encontramos cerca de su casa, en paternal. No había nadie en la calle, la ciudad parecía nuestra. Caminamos hacia Parque Chas, conversamos de a ratos, me gustaba compartir el silencio con ella. Anduvimos por una calle que nos devolvió a una esquina por la que ya habíamos pasado. Era una calle que se cruzaba con sí misma. No puede ser, es perfecta, dijo Andrea y se sentó en el cordón con una expresión de abatimiento, como si realmente lo considerara imposible o perfecto. Me senté junto a ella, el cordón estaba frío. No puede ser, Mata, no puede ser, me dijo y me miró con esos ojos pardos que daban ganas de llorar. Empezamos a caminar de vuelta. A la derecha, una puerta negra tenía una de sus hojas abiertas. El pasillo que mostraba era largo y oscuro pero al final podía distinguirse una escalera iluminada por el sol. Agarré la mano de Andrea y crucé la calle. Entramos por la puerta abierta y avanzamos por el pasillo. Una mujer con los pelos blancos despeinados nos miró pero no dijo nada. Llegamos a la escalera y subimos. Eran escalones altos que obligaban a un esfuerzo, a medida que ascendíamos el sol calentaba un poco. Al final había una puerta verde entreabierta. Empujamos y nos dio paso a la terraza. El piso plateado devolvía un reflejo insoportable. Nos asomamos a la baranda. La ciudad de siempre hacía una espiral, un remolino que nos había atrapado para dejarnos ahí. La expresión en la cara de Andrea cambió de a poco hasta llegar a una sonrisa. Gracias, Matiz.
Sunday, January 11, 2009
Voy a dejar que siga hablando David acerca de los asesinatos masivos del Estado de Israel en Palestina. Visiten tierrametida.
PD: gracias Natalia por la data.
Friday, January 09, 2009
Bueno, econtré a un judío que habla con coherencia acerca del tema.
"Solo vemos a la minoría activa de los judíos israelíes, pero la mayoría de los judíos nos avergonzamos del Estado de Israel: corrupción constante, ocupación, nuclearización. Para quienes vivimos fuera de Israel y nos consideramos liberales [progresistas], el Estado de Israel es una ofensa a nuestra inteligencia. Israel es como esa "tía loca" que querríamos ocultar en el ático", Norman Finkelstein (politólogo yanqui).
"Solo vemos a la minoría activa de los judíos israelíes, pero la mayoría de los judíos nos avergonzamos del Estado de Israel: corrupción constante, ocupación, nuclearización. Para quienes vivimos fuera de Israel y nos consideramos liberales [progresistas], el Estado de Israel es una ofensa a nuestra inteligencia. Israel es como esa "tía loca" que querríamos ocultar en el ático", Norman Finkelstein (politólogo yanqui).
Me levanto, leo el diario y me entero de que el gobierno de Israel no acata una resolución de la ONU. Leo que siguen los bombardeos y matanzas, que la gente no sólo muere por instrumentos de guerra sino que también están muriendo de hambre. Busco en internet opiniones de judíos respecto al tema. Para esto pongo en gugl: soy judío. Leo varios comentarios. Existen posiciones moderadas (tenemos que defendernos, algo hay que hacer, pero esto es demasiado) hasta impresentables (ellos (ellos) nos odian, hay que exterminarlos). Pero nadie dice nada del derecho de los palestinos. No encuentro (todavía estoy buscando) que ningún judío hable del derecho de los palestinos a tener su Estado Palestino.
A ver, volvamos un poco. El estado de Israel como lo conocemos se creó después de la Segunda Guerra Mundial. Desde hacía miles de años que el pueblo Judío consideraba aquellas tierras su tierra y las potencias de Occidente aprovecharon y dijeron: acá que están estos muchachos musulmanes que no nos caen tan bien vamos a poner un país que nos sirva de garca vigilante. (Recordemos que esas mismas potencias, persiguieron, asesinaron y expulsaron judíos en diferentes épocas de su historia, pero eso es otro cuento.) Entonces, agarraron un país (Palestina), le quitaron el pedazo más copado y crearon el Estado de Israel. (Algo así como si a Argentina le quitaran la pampa húmeda para dárselo a otro.) Como suponen bien, los palestinos no quisieron aceptar esto, tampco sus vecinos musulmanes, así que hubo guerra que demás está decir ganó Israel con sus armas yanquis. Así, la casi totalidad de palestinos que vivían hacía siglos en ese territorio se los expulsó al otro lado. Pero no conformes con esto, el flamante Estado de Israel guiado por las potencias de Occidente invadió otros territrios que, amablemente, se le habían dejado a Palestina. Hasta que sólo les dejaron Cisjordania y la Franja de Gaza. Pero no se los dejaron así nomás, Cisjordania está controlada militarmente por Israel, además de estar poblada por colonias de Israel en territorios que no le pertenecen. La Franja de Gaza es un pedacito de tierra de 50 km de largo por 10 km de ancho donde fueron a parar los refugiados de las guerras antes mencionadas. Ahora son 1, 5 millones de personas que tienen que vivir sólo con lo que se produce en ese terreno porque Israel mantiene un bloqueo por todas sus fronteras. Claro que la Franja no alcanza para producir nada. No me refiero a insumos que cualquier israelita consideraría básico si no a comida, agua, electricidad.
Si uno piensa en todo esto, sea del país que sea, sea del credo que sea, tiene que enojarse y comprender por qué los palestinos están enojados.
A ver, volvamos un poco. El estado de Israel como lo conocemos se creó después de la Segunda Guerra Mundial. Desde hacía miles de años que el pueblo Judío consideraba aquellas tierras su tierra y las potencias de Occidente aprovecharon y dijeron: acá que están estos muchachos musulmanes que no nos caen tan bien vamos a poner un país que nos sirva de garca vigilante. (Recordemos que esas mismas potencias, persiguieron, asesinaron y expulsaron judíos en diferentes épocas de su historia, pero eso es otro cuento.) Entonces, agarraron un país (Palestina), le quitaron el pedazo más copado y crearon el Estado de Israel. (Algo así como si a Argentina le quitaran la pampa húmeda para dárselo a otro.) Como suponen bien, los palestinos no quisieron aceptar esto, tampco sus vecinos musulmanes, así que hubo guerra que demás está decir ganó Israel con sus armas yanquis. Así, la casi totalidad de palestinos que vivían hacía siglos en ese territorio se los expulsó al otro lado. Pero no conformes con esto, el flamante Estado de Israel guiado por las potencias de Occidente invadió otros territrios que, amablemente, se le habían dejado a Palestina. Hasta que sólo les dejaron Cisjordania y la Franja de Gaza. Pero no se los dejaron así nomás, Cisjordania está controlada militarmente por Israel, además de estar poblada por colonias de Israel en territorios que no le pertenecen. La Franja de Gaza es un pedacito de tierra de 50 km de largo por 10 km de ancho donde fueron a parar los refugiados de las guerras antes mencionadas. Ahora son 1, 5 millones de personas que tienen que vivir sólo con lo que se produce en ese terreno porque Israel mantiene un bloqueo por todas sus fronteras. Claro que la Franja no alcanza para producir nada. No me refiero a insumos que cualquier israelita consideraría básico si no a comida, agua, electricidad.
Si uno piensa en todo esto, sea del país que sea, sea del credo que sea, tiene que enojarse y comprender por qué los palestinos están enojados.
Thursday, January 08, 2009
El otro día hablaba con Euge acerca de esa sensación de estar lejos que me agarra. Me pasa estar haciendo algo, cualquier cosa, y de pronto perder la concentración y no poder volver. Mis manos son de otro, mis ojos y mis oídos también. Es como si viera una película de mí mismo toda filmada en primera persona.
Wednesday, January 07, 2009
Si estuviera despierto podría creer
que corrimos una carrera sobre camellos,
(el desierto se formaba a nuestra espalda);
que cuando un auto se queda sin nafta
puede usarse como lancha;
que después de morir, uno todavía piensa
(el asfalto se piensa frío, la sangre tibia);
que la puerta del garage de los viejos esconde cosas,
tantas que no se pueden identificar;
que vos sos ella, pero ella y ella también
(yo siempre soy yo y otra vez yo);
que la lluvia puede esquivarse
(las palabras nunca, aunque se callen);
que me dijiste te amo y no quise creerte
(aún en sueños, ¿cómo creerte?).
que corrimos una carrera sobre camellos,
(el desierto se formaba a nuestra espalda);
que cuando un auto se queda sin nafta
puede usarse como lancha;
que después de morir, uno todavía piensa
(el asfalto se piensa frío, la sangre tibia);
que la puerta del garage de los viejos esconde cosas,
tantas que no se pueden identificar;
que vos sos ella, pero ella y ella también
(yo siempre soy yo y otra vez yo);
que la lluvia puede esquivarse
(las palabras nunca, aunque se callen);
que me dijiste te amo y no quise creerte
(aún en sueños, ¿cómo creerte?).
Tuesday, January 06, 2009
Cuando llegué a la pizzería, en la mesa donde se sentaban mis amigos, sólo quedaban dos sillas vacías: una junto a un tipo pelado y enorme que había visto alguna vez y otra a la derecha de una chica de rastas que no conocía. Me senté junto a la chica. Aquella noche me enteré de que era napolitana, que había estudiado letras y que era encantadora.
Meses más tarde, mientras comíamos palmitos directamente de la lata (sí, todavía era posible comprarlos) se me ocurrió decirle:
- Si aquella noche no me hubiera sentado en esa silla, nosotros dos no estaríamos acá. - Ella tomó un sorbo de vino, me miró y dijo:
- Si aquella noche hubieses elegido sentarte junto a un pelado feo en lugar de una chica linda serías bastante boludo (le gustaba decir boludo).
- ...
- ...
- Cierto.
Meses más tarde, mientras comíamos palmitos directamente de la lata (sí, todavía era posible comprarlos) se me ocurrió decirle:
- Si aquella noche no me hubiera sentado en esa silla, nosotros dos no estaríamos acá. - Ella tomó un sorbo de vino, me miró y dijo:
- Si aquella noche hubieses elegido sentarte junto a un pelado feo en lugar de una chica linda serías bastante boludo (le gustaba decir boludo).
- ...
- ...
- Cierto.
Subscribe to:
Posts (Atom)