Saturday, March 18, 2006


Sábado, casi medianoche. Qué groso que es Stevie Wonder. Muy groso. Entre miles de temas ñoños y bastante balardas, se encuentran varias perlitas. Ahora estoy en la búsqueda de todas las versiones de Pastime Paradise. Temaso. Mal. Se zarpa.
Mientras disfruto de la onda de este negro, les cuento lo que se me ocurrio hoy para la novela. El protagonista, ya bastante metido en el océano de mierda, de miserias humanas, se le da por entrar en edificios y casas. Así, sin más. No puede parar de pensar en todas las otras existencias que lo rodean y le parece extraño no estar conectado de alguna manera con ellas. Así que empieza a entrar en los edificios de oficinas del centro, cerca de su trabajo. Sube a las terrazas y mira la ciudad que cambia cada vez, hay una ciudad distinta para cada edificio. Después entra en edificios de departamentos, donde saluda a todos los que ve. Ahí se le pega esto de saludar a la gente. Después decide probar en los barrios y las casas. Claro que esto termina en violencia y algunas costillas rotas. Pero a través de esta búsqueda siente que en realidad existe una conexión, que en realidad todos somos una sola existencia. Que los individuos son otra invención, otra forma de satisfacer el egoísmo.
Espero descubrir qué descubre el tipo.

2 comments:

Anonymous said...

sigo los comentarios del post anterior.

leí en el blog de terranova que tenías el propio y también de qué se trataba esta especie de experimentación, entonces, me interesó y llegué acá.

saludos.

Mata said...

Ahora sí.